Hace poco me compré un disco usb de 64MB. Ha venido a solucionar uno de mis problemas permanentes, que no era otro que el de las copias de seguridad de mis datos importantes. Hasta que compré el disco hacía las copias de seguridad en CD regrabables. Podía guardar mucha información – más de 600MB – pero el tiempo que necesitaba para hacer el backup y sobre todo, para grabarlo a CD, era alrededor de media hora. Demasiado tiempo.
Al comprar el disco usb y decidir usarlo para hacer los backups, el tamaño del disco me ponía un límite a los datos a guardar. Así que he reducido la información a almacenar en el backup ligero, de manera que sólo guardo aquello que realmente considero imprescindible para ponerme de nuevo en marcha y guardar el backup ligero en el disco usb. Este proceso de hacer el backup y copiarlo al disco usb me lleva menos de tres minutos, lo que ya es razonable íncluso para hacer un backup diario.
Y todo gracias a algo como un mechero, que puedo llevar en el bolsillo cuando salgo de casa. Como dice Pepito Grillo en Pinocho – la peli preferida de Fátima – ¡ lo que es el progreso !
Precisamente estaba yo leyendo el número de «Computer hoy» (126) cuando llegué a una comparativa sobre estos aparatejos y me quedé alucinada, no sólo por su diseño o tamaño (algunos tienen forma de mechero y otros hasta de reloj…), sino por la catidad de información y lo útiles que pueden llegar a ser…
Un saludo para todos y feliz verano,
María
Personalmente añadiria la conveniencia de formatearlos añadiendoles la opcion de compresion, no es una compresion de la altura de ZIP o similares, pero para cosas convencionales la tasa de compresion es suficientemente valida
¿Alquien me recomienda alguna marca en especial? Estoy decidida a comprarme uno. Lo de la revista muy bien, pero a veces prefiero consejos de la gente directamente, que lo haya probado ya por algún tiempo.
María
Yo tengo el de Trascend – http://www.trascendusa.com
Al final me lo compré! Muy bueno. La verdad es que estoy empezando a verle más ventajas de las que pensaba, aunque eso de ser tan pequeño y yo tan despistada… no sé, espero no tener que lamentar nunca su pérdida…
María